Significado espiritual de los trenes

El significado de soñar con trenes no es nada sencillo, es un sueño romántico, es un sueño inquieto, es un sueño que nos evade y donde es normal que viajemos mentalmente, por lo tanto es un sueño muy especial.

Hoy en día hay muchos medios de transporte: coche, autobús, avión, tren, barco… y muchos de nosotros los utilizamos prácticamente a diario y otros sólo de vez en cuando.

El tren es normalmente para distancias cortas, regionales o nacionales, pero poca gente sabe que si quisiéramos, podríamos ir en tren desde Portugal hasta prácticamente Vietnam, porque todos estos países están unidos por vías de tren.

Significado espiritual de los trenes – Significado

Creemos que lo sabemos todo sobre los trenes porque lo vemos como algo normal, pero hay muchos secretos que desconocemos, por ejemplo ¿sabías que hay trenes que alcanzan casi 600 km por hora?

Muchos transportes son más cómodos, más rápidos y más fáciles de usar, pero el tren tiene algo que nos atrae.

Tal vez sea el traqueteo, el hecho de tener una cafetería dentro donde podemos tomar algo tranquilamente, el hecho de poder ir mirando el paisaje con seguridad y sin preocuparnos de la conducción, o puede ser la peculiaridad de circular por unas vías de tren…. No sabemos qué, pero nos encanta.

En el libro 5005 Sueños se hace una interpretación muy clara de los sueños. Es una lectura muy recomendable si quieres conocer el significado de muchos de tus sueños. Te aconsejo que lo compres.

Nos gusta, nos gusta mucho y nos atrae y, como muchas otras ideas y recuerdos, es normal que nuestra mente evoque el tren y que soñemos con trenes. Debemos tener siempre presente que nuestro subconsciente repite lo que ve y más aún si eso le atrae..

Lo normal es que si soñamos con trenes, en la mayoría de los sueños el tren se mueva (no siempre será así pero sí muchas veces) con lo cual estamos ante sueños de movimiento, que denotan desarrollo.

De una forma u otra, mayor o menor, pero en la vida del soñador hay un progreso y, normalmente, debe ser hacia la madurez.

Se trata de fantasías que representan el desarrollo de la personalidad en todos los sentidos: personal, sexual, profesional..

No hay duda de que la formación del soñador es importante, pero casi siempre implican una evolución interna, normalmente en la persona que sueña, que está expuesta como cualquier otra, a los avatares de la vida.

Este sueño con trenes en movimiento es normal, pero ¿qué ocurre si nuestro tren soñado se detiene y no se mueve? A diferencia de los sueños de movimiento, esta fantasía representa una interrupción del desarrollo que pone de relieve un punto de inflexión, que muchos psicólogos interpretan como una parada para recuperar fuerzas y nuevas energías.

Podemos verlo como algo positivo, porque de vez en cuando en la vida es necesario parar «el tren de la vida» que llevamos e incluso dar un paso atrás, para ser conscientes de dónde estamos y volver a la pista con más ímpetu y entusiasmo.

Por regla general, soñar con trenes da lugar a una oportunidad de crecimiento. Siempre que viajamos o salimos de nuestra zona de confort, la mente se «ensancha» y el conocimiento conduce a la madurez en el sentido amplio de la palabra.

Cuando soñamos que vamos en tren, lo que hacemos básicamente es buscar el destino, buscar mejorar, y porque queremos llegar a un nuevo puerto que nos permita vivir en mejores y más óptimas condiciones que las que tenemos ahora.

Si lo que representan nuestras fantasías es un tren del que nos bajamos, estamos mostrando una falta de confianza en lo que hacemos, porque no estamos convencidos de que esa sea la mejor opción y por eso preferimos bajarnos y ver si encontramos otros trenes que nos lleven. A lugares mejores. Queremos y buscamos un cambio.

Este sueño y su interpretación están relacionados con la expresión «bajarse de un tren en marcha», que implica abandonar lo que estamos haciendo porque no nos sentimos seguros con ello.

Es una clara señal de que nuestra vida está sometida a continuos y constantes cambios, cómo decir que estamos en una montaña rusa de sentimientos. Queremos estabilidad, queremos que el tren se mueva de forma lenta pero segura, sin tantos altibajos.

Significado espiritual de los trenes – Simbolismo

Ir dentro de un tren en sueños es indicativo de que estamos totalmente dispuestos a participar en cualquier aventura y oportunidad que se nos presente, pero sin mirar al futuro, sino centrándonos en el presente y disfrutando plenamente de cada paso.

Pero cuando el tren se nos escapa es, quizás, porque estamos perdiendo oportunidades o porque deberíamos prestar más atención a las señales que la vida no envía, ya que es evidente que algo va mal.

Puede ocurrir que el tren de tus sueños se retrase, en cuyo caso no es más que un reflejo de tu propia terquedad al ignorar los consejos y las advertencias que te lanzan y tropezar una y otra vez con los mismos errores.

Cuando el tren se detiene es, tal vez, porque ha llegado el momento de tomarse las cosas con más calma, de detenerse un instante para disfrutar del momento y de todo lo que se ha conseguido hasta ahora, de relajarse, de pensar por un momento sólo en nosotros mismos, de estar cien por cien receptivos a las buenas oportunidades que puedan surgir a partir de ahora y evitar así que, cuando lleguen, pasen ante nuestros ojos sin que nos demos cuenta.

Si quieres profundizar en el simbolismo de los elementos oníricos, te recomiendo encarecidamente que leas el libro El significado de los sueños, que encontrarás en tu librería habitual o en Internet, pinchando en la imagen que encontrarás a continuación.

En la sociedad en la que vivimos, siempre estamos pensando en consumir y tener todo «a la última» y nuevo.

Si soñamos que vamos en un tren antiguo simboliza la honestidad de la persona que sueña, que prefiere viajar humildemente en una forma de vida sin glamour pero confortable, que en un tren lleno de riqueza que no es real. Somos auténticos y permanecemos en esa posición caiga quien caiga.

Nos sentimos mal, y hemos sido arrollados por una máquina que no podemos controlar, sufrimos las consecuencias de los errores o de la falta de éxito.

A veces es mejor ir despacio y con seguridad, paso a paso, que rápido y sin control.

Este tipo de sueño nos dice que tenemos que estar despiertos y que tenemos que mirar a ambos lados y ver lo que nos rodea, porque aunque creamos que estamos bien acompañados y que tenemos verdaderos amigos, nos pueden traicionar y llevarnos por delante.

Si el sueño no se desarrolla dentro del tren, puede significar que tu vida se caracteriza por un exceso de influencia de las personas que nos rodean. No vivimos nuestra vida de forma natural y coherente, sino que muchas veces nos dejamos llevar por el qué dirán.

No sólo da una indicación del desarrollo de la personalidad, sino también de la percepción. La naturaleza y el origen del movimiento muestran cómo se ve a sí mismo el soñador.

Si en el sueño aparece una locomotora de vapor, uno se siente viejo, mientras que un tren rápido y moderno indica euforia y juventud.

Si el tren transporta mercancías, éstas pueden ser una indicación del pasado y de la vida anterior del soñador, que puede ser complicada si no nos desprendemos de las cargas de la vida.

En particular, el tipo de tren de mercancías da una indicación de cómo se relaciona el sueño con tu vida, por ejemplo, si está dañado o sucio, es que todavía hay que arreglar muchas cosas en la vida.

El tren de Navidad nos transportará mágicamente al Polo Norte, un viaje maravilloso para conseguir nuestros deseos más anhelados.

Entre tantas imágenes icónicas que año tras año traen consigo las celebraciones de las fiestas navideñas, el Tren de la Navidad es una de las más llamativas, que nos traslada a nuestros más profundos recuerdos de infancia al llegar a la tierra de San Nicolás y disfrutar de los esperados juguetes y regalos, característicos de estas fechas.

Conclusión

El tren es una gran representación de nuestro viaje por la vida, de las oportunidades que se nos presentan y de cómo reaccionamos ante ellas, es decir, de si sabemos aprovecharlas o si, por el contrario, las dejamos escapar.

Así, un tren en movimiento es un gran símbolo de la vida misma y del hecho de que estamos plenamente inmersos en ella, viviéndola al máximo y apasionadamente sin perder un solo detalle de nuestro viaje por esta existencia.